¿Por qué es importante una rutina de cuidado de la piel nocturna?

Tu piel experimenta una variedad de cambios a lo largo del día. La exposición a contaminantes, rayos UV y otros factores ambientales puede llevar a un daño acumulado. Durante la noche, tu piel entra en un modo de reparación, lo que la convierte en el momento perfecto para proporcionarle el cuidado e hidratación que necesita.

¿Cómo limpiar de manera efectiva?

Paso 2: Exfoliación (2-3 veces a la semana)

¿Cómo aplicar tónico?

Paso 4: Tratamiento (Sérums y Tratamientos Localizados)

¿Cuál es el propósito de una rutina de cuidado de la piel nocturna?

Una rutina de cuidado de la piel nocturna ayuda a limpiar, reparar e hidratar tu piel mientras duermes, permitiéndole recuperarse de los estresores ambientales diarios.

¿Con qué frecuencia debo exfoliarme?

Para principiantes, exfoliarse 2-3 veces a la semana es generalmente suficiente. Ajusta según la respuesta y sensibilidad de tu piel.

¿Puedo omitir algunos pasos en mi rutina nocturna?

Mientras que una rutina completa es ideal, puedes simplificarla según las necesidades de tu piel. Como mínimo, limpiar e hidratar son esenciales.

¿Cómo sé qué productos son los mejores para mi tipo de piel?

Entender tu tipo de piel—ya sea grasa, seca, mixta o sensible—es crucial. Presta atención a cómo responde tu piel a diferentes ingredientes y consulta recursos para recomendaciones personalizadas.

¿Qué pasa si tengo piel sensible?

Elige productos suaves y sin fragancia que estén formulados para piel sensible. Siempre realiza una prueba de parche con nuevos productos antes de aplicarlos en toda tu cara.